domingo, 28 de noviembre de 2010

Por un restaurante japonés en la ciudad de Castellón (2ª parte)

Buenas otra vez, como dije, me queda por comentar el otro restaurante japonés de Castellón "Fushion"(calle Fola), ya comenté que la cocina es la misma que "Tastem" en lo que se refiere a la sección de comida japonesa, pues este restaurante  la característica que tiene es que "fushiona" 2 cartas de comida, que no estilos de comida, por un lado presenta una carta de tapas nacionales (pulpo gallega, ensaladilla rusa, bravas...) y por otro lado una carta de comida japonesa. 

En un principio se rumoreaba que el antiguo "Peñalen" se iba a unir a la moda de la alta cocina "low cost" pero al final ha optado por esta combinación. Ya veremos como funciona, y supongo que aguantará una temporada debido a la fama que le precedía como uno de los grandes restaurantes de la ciudad, pero también tuvo el lastre de ser uno, por no decir el más, caro de la ciudad. Sólo el tiempo lo dirá.

Volviendo al restaurante en sí, hay que decir que la decoración es sobria e intimista, colores grises y mobiliario en madera oscura. Buena distribución entre mesas, es difícil que te moleste la mesa de al lado, pero si que pude ver que si el grupo es grande, los juntan demasiado y te toca estar codo con codo, y puede resultar incómodo.

El personal es atento, pendiente del comensal, aunque si se acumula gente, les sobrepasa, pero eso pasa hasta en las mejores familias, si tienes 2 camareros y te viene más gente de la que esperas, no queda más remedio que esperar, pero no se hace demasiado incómodo. He de comentar que fui un lunes, sí, habéis oído bien, lunes abierto, lo que ofrece una alternativa a esta ciudad un día que de normal es muy difícil encontrar algo en la ciudad. Pero eso mismo de abrir el lunes también tiene su lado negativo, y cuando hable de los platos, ya os explicaré el porqué.

Como lo que estaba buscando era un restaurante japonés en la ciudad pasé de la carta de tapas nacionales, y fui directamente a por la japonesa, me sorprendió que era muy parecida a la de "Tastem" (cuando fuí no sabía la historia de la cocina), y fue pedir los platos y las sospechas se hicieron aún más fuertes.

Como primer plato pedí tartar de atún, y he aquí el primer error, mío por pedirlo y suyo por ofrecerlo, tengamos en cuenta que el pescado fresco se conserva en buenas condiciones un máximo de 2 días, y por cuestión del mercado ese pescado es como muy pronto del viernes, hecha la puntualización, lo primero que llama la atención es la cantidad, que es irrisoria, en cuanto al sabor, nada especial, probablemente por la conservación de nevera que ha tenido por ser lunes, no era jugoso, y el aguacate que lo acompañaba estaba duro, la salsa de soja y mostaza que te ofrecen para acompañarlo es necesario para darle sabor.


Para seguir, dragon roll, versión del maki sushi, pero que en vez de usar hoja de alga nori, utilizan aguacate laminado, el relleno era de 4 pescados, he de decir que este estaba rico, pero pasa igual que el maki sushi de "Tastem" cantidad corta, además como complemento pedí 2 sushis, uno de pez mantequilla y otro de atún braseado, el de pez mantequilla no era nada especial, pero el de atún braseado estaba muy bueno, por el braseado y un punto de soja dulce que lo hizo muy sabroso.


Como siempre, las cantidades son cortas y pedí postre, todos de elaboración casera, pero ninguno de tinte oriental, elegí canutos de crema, postre sin mucho misterio pero bien hecho, la crema tiene un punto acido de limón refrescante y el chocolate puro le daba el contraste amargo.


Para beber pedí cerveza, Sapporo, que ya comenté en el post anterior, aprovechando eché un vistazo a la carta de vinos, y sinceramente, es muy muy corta, y a precios muy muy altos, como toda la carta en general. Por que este es el gran punto negro del restaurante, 46 € por lo que os acabo de presentar, que sinceramente, que aunque mejora con creces a "Tastem" no deja de ser caro. He decir también, que en estos restaurantes no es lo mismo ir sólo que acompañado, si se va en grupo, uno sale a menos dinero y prueba más cosas.

Bueno, aún así, esta ciudad sigue mereciéndose un restaurante japonés en mejores condiciones.

Para la próxima ocasión comentaré otro restaurante del grao "La tasca del Puerto" y otro en Castellón "L´arroseria de Nelo", en esta ocasión los comentarios no serán tan negativos, más bien todo lo contrario.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros.



sábado, 27 de noviembre de 2010

Por un restaurante japonés en la ciudad de Castellón, Tastem. (CERRADO)

Buenas a todos:

Como dije en el último post, el restaurante que me quedaba por comentar era el restaurante de cocina japonesa "Tastem",  ubicado en el casino del grao de Castellón. Pero a lo largo de estos días también he tenido la oportunidad de probar el nuevo restaurante de los propietarios del antiguo "Peñalen" que en la actualidad se llama "Fushion" y que está en la calle Fola de Castellón.

Así que he podido probar los 2 únicos restaurantes de la ciudad que se denominan "japoneses" (a parte están los restaurantes orientales que en sus cartas siempre ponen una sección de cocina japonesa y vietnamita junto con la china), y por desgracia ninguno de los 2 es bueno, tanto por la comida como por el precio. A esto hay que añadirle que lo que realmente se esconde detrás de ambos restaurantes es un monopolio de la cocina japonesa, pues pude saber que el chef y todo el equipo de cocina de "Fushion" son los mismos que había en "Tastem", Y si ya no me gustó "Tastem" obviamente me pasó lo mismo con "Fushion".

Pues empecemos con "Tastem" que fue el primero que probé. A este restaurante ya fuí en otras 2 ocasiones y ya entonces me dije que no volvería, pero pequé por 3ª vez, eso sí, en esta ocasión tengo registro gráfico.

De inicio decir, que el servicio es altamente mejorable, por no decir que no tienen ni idea, no te explican absolutamente nada de los platos, no saben en que consiste la carta y sirven con desidia. Como digo, muy mejorable.

La decoración del local bastante fría, además esta integrado en el casino, y para entrar te exigen el DNI para registrarte (les pregunté si era necesario, que no me gusta que me tengan registrado en el Casino, cuando voy a comer y no a jugar, la respuesta fue que son exigencias de la casa), y mientras comes, ves como la gente pasa al lado tuyo para entrar al casino, lo que te quita toda intimidad. La cocina está expuesta al público protegida por una mampara transparente firmada por todos los jugadores del Villareal CF, supongo que eso está considerado un grado de calidad, pero a mi me dice bastante poco. Al menos ves como manipulan la comida y te da cierta garantía de que siguen las normas de sanidad.

Con lo que respecta a la comida, me sirvieron como aperitivo unos fideos negros con pasta de alguna cosa que no me explicaron, pero que sabía a frutos secos, sinceramente, paso tan desapercibida que no guardo ningún recuerdo.




Para seguir, maki-sushi de atún picante, de este plato decir, que lo de picante es relativo, tiene un toque picante pero no lo que esperaba (he de decir que gusta bastante el picante, así que la mayoría de platos se me quedan suaves), el arroz blanco estaba normal, si lo hacen mal ya sería de apaga y vámonos, y te dejan, como en todos los restaurantes japoneses, el cuenco con soja y el wasabi. En lo que respecta a la cantidad, estos restaurantes siempre pecan de poner poca comida, y este no fue diferente, sinceramente no alcanzas la más mínima sensación de saciedad.




Como 2º plato pedi un Yakishoba de marisco y verdura, el plato consiste en fideos con una mezcla de verduras y marisco, me recordó a unos fruti di mare con una salsa diferente, pero que te deja totalmente indiferente, se agradece por ser pasta y así llena un poco más el estómago, pero no por el sabor.




Como me quedaba con hambre pedí postre, y tomé helado de wasabi, me llamó la atención que lo hicieran de rábano picante (wasabi) pero a mi me recordaba a helado de vainilla, no era muy cremoso y como ya os he dicho me recordaba más a vainilla que a wasabi (me plantee preguntar como conseguían este sabor tan "peculiar" en el helado de wasabi, pero no tenía tiempo).




Para beber tomé sólo una cerveza, como japonesa tienen únicamente sapporo, siendo como era, el único restaurante japonés no hubiera estado de más que tuvieran también Kirin, y por el precio que cobran que menos que aportar variedad.


De la cerveza Sapporo decir, que las cervezas japonesas son bastante más suaves que las nacionales, pues  suelen utilizar también arroz en la mezcla con la cebada, cerveza muy bebible, y a la que si te despistas te tomas 3.




Lo más preocupante no es la cantidad, ni la calidad, lo difícil es pagar, sinceramente los cerca de 40 € que pagué me parecieron un robo para lo que comes, y por como te lo sirven. Personalmente no volveré a este restaurante a no ser que sea causa de fuerza mayor.

Nada recomendable, lo triste es que dicen que es el mejor de la ciudad, y teniendo en cuenta que los que lo llevan en la actualidad hacen las mismas recetas que cuando estaba el anterior chef (que ha fichado por "Fushion") los sabores son los mismos, y personalmente, yo creo que esta ciudad se merece un restaurante japonés de calidad de una vez y que no tengamos que irnos a Valencia, Barcelona, Madrid o al extranjero para probar un japonés en condiciones.

En el próximo post comentaré el restaurante "Fushion" pero ya advierto que la crítica va en la misma línea.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros. 


lunes, 22 de noviembre de 2010

Casino Antiguo de Castellón

Buenas a todos, perdonad que haga tiempo que no publique nada, pero me ha faltado tiempo para ello.
Así que retomaré desde donde lo dejé. Que si recordáis era el Restaurante del Casino Antiguo de Castellón.

Del restaurante decir que fue una autentica decepción, del local decir que no me gustó la distribución en pasillo largo que le da bastante sensación de frialdad, eso también implica que el personal lo pase peor, por que han de ir pasillo arriba pasillo abajo, además la decoración del local contrasta mucho con la de la recepción del Casino, de la visión de un lugar diáfano, claro, y de decoración actual, a la de la recepción en maderas oscuras y de estilo más que clásico.

Yendo a lo importante que es la comida, los entrantes fueron muy flojos, empezamos con una sinfonía de tomates y anchoas, se usaron 3 tipos diferentes de tomate, raff, cherry y otro más que sintiéndlo mucho no recuerdo y tampoco nos los dijeron, bien de sabor pero no hay mucho misterio en poner tomate y una anchoa decente.


Como 2º entrante un carpaccio de cigala gelatinificada cortada tan fina, que no se sabe si es transparente por la gelatina o por lo fino del corte, a eso hay que sumarle que a penas tenía sabor, así que la conclusión es fácil, mejor no pedirlo.


En 3er lugar un sepionet de playa, sabroso pero con un exceso en el tostado quizá, en este plato no se si soy del todo justo, pero ver lo anterior me hizo ser más quisquilloso, de todas maneras, esto es como siempre, hacer un palto malo con un buen producto es muy difícil, así que estaba bastante aceptable, pero sin mucho misterio.


Como plato principal comi steak tartar, de este decir que estuvo muy bien, solomillo bien tierno, jugoso, y especiado con picante al punto que a mi me gusta, pero ración poco abundante, y visto el hambre que había dejado los entrantes, me hubiera gustado comer un poco más.


Para terminar postre casero, en este caso brownie, y una vez más, nada del otro mundo, así que no gastaré muchas palabras en él.


Para beber, tomamos Santa Rosa 2006 reserva de Enrique Mendoza, que cuadró muy bien con el tartar, pero quizá muy intenso para los entrantes, recomendable dejarlo que se abra en botella antes de servirlo, por que quizá decantarlo haga que evolucione demasiado rápido y pierda muy rápido algunos de sus aromas, y aparezca demasiado pronto los terciarios.

Y hasta aquí la crítica, lamento que sea tan negativa, pues a esto hay que sumarle el precio, que yendo a carta sale aproximadamente, sumando vino para 4 personas, unos 45-50 euros por cabeza, así que por ese precio se me ocurren restaurantes mucho mejores.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros.


martes, 9 de noviembre de 2010

Visita al Grao, contraste de clases (2ª parte)

Y aqui viene el contraste, cambiamos de un restaurante de toldo y sillas de plástico a todo lo opuesto, a uno de los restaurantes clásicos de la zona, "Rafael" (C/Churruca 28 tlf:964282185 web: www.restauranterafael.com)

Se decía que la calidad del restaurante había bajado mucho, y que no merecía la pena conocerlo, y mi conclusión es todo lo opuesto. Cocina de calidad, con producto de mercado, sin extravagancias, pero muy buena, trato excelente, atento en todo momento pero sin ser agobiantes. Y eso que en una ocasión fui sólo, habiendo otras 3 mesas de empresa, no me hicieron esperar lo más mínimo.

A lo largo de esta semana he ido 2 veces, una sólo y otra con mi padre, con lo que puedo ofrecer más opinión al respecto.

Yendo solo, como aperitivo ofrecieron unas croquetas de jamón, nada en especial, con la cerveza todo va bien.


Como primer plato probé el tartar de salmón, muy bien hecho, sabroso, la verdad es que estaba muy bueno, lamentar la cantidad, ración corta, pero muy bueno.


Lo de elegir el tartar de salmón vino por que en carta también tienen steak tartar y me apetecía hacer un mar y montaña del tartar, la pena estuvo en que ya no les quedaba steak, pero tuvieron el detalle de dejarme probarlo y me sacaron una pequeña degustación, decir que estaba bueno, pero me quedo con el de Kina de Categallo.


Como no había steak, opté por pescado, y la elección fue raya, nunca la había probado, y decir que estaba muy rica, con una salsa con tomate pimiento y pimentón picante que estaba muy bien. La carne de este pez es suave, se deshace en la boca, lo único, es que es incómodo por tener que retirar los cartílagos todo el tiempo, por que la opción de comértelo es aún más incómoda.


Y para terminar el postre, quizá esto sea lo más llamativo, todos los postres ofrecidos son caseros, y te los presentan en un carro, había oído que antes en restaurantes clásicos se servían de esta forma, hasta donde yo sé, de oidas, por ejemplo en el Majestic de Barcelona, los sirven de esta manera.


De todos los que te ofrecen yo opté por tarta de queso con arándanos, que estaba de vicio, y la tosta de cabello de ángel con almendra y piñones, y tres cuartos de lo mismo, muy buena. Como comentario decir, que diabéticos abstenerse.



Del maridaje, poco que decir, en vez de servir por copas, te presentan botellas de 3/8, y en mi caso fue un albariño, bastante flojo, del que ni me plantee hacerle foto, podríamos decir que es el único punto negro de una gran jornada.

En la segunda ocasión que fui con mi padre, se reprodujeron las sensaciones, trato amable, conversación distendida, también por que en esta ocasión éramos 2 mesas en todo el restaurante, pero eso nos permitió tratar más con ellos y entender mejor al restaurante, como detalle curioso hablar de la cristalería, una cristalería que respira solo, para vinos mayores que necesitan decantado, con esta copa lo puedes evitar y conserva mejor los aromas, parece una tontería pero es cierto, bebimos un Santa Rosa Reserva 2004 de Enrique Mendoza, que dio la casualidad que 2 semanas antes ya había bebido también, y la diferencia era notable, y la evolución en copa más rápida de normal.

Como en la ocasión anterior, el hecho de ir acompañado, en este caso por mi padre, en lo último que pienso es en hacer las fotos (es algo que tengo que mejorar, como muchas otras cosas), decir que para compartir, pedimos sepionet de playa, que estaba riquísimo, plato que requiere pan sí o sí, el otro entrante fueron los erizos gratinados, que también, estaban muuuuy buenos. Ambos fueron recomendaciones por parte de la casa. He de decir que mientras esperaba a mi padre, me di un caprichete y me pedí un par de ostras, que como todos sabemos no requieren mucha elaboración, solo saber abrirlas, eso no quita para que estuvieran buenas.


Como principal, pedimos un arroz negro, muy bueno el punto del arroz, sabor intenso, muy rico, pero se echa en falta un poco de cantidad, miden demasiado bien las raciones y no tienes opción a repetir.

Tras esto llego el postre, que ya os he presentado antes como se sirven, en esta ocasión opte por tarta de 3 chocolates, muy buena, lo acompañe de un vino dulce que hace tiempo que buscaba en una carta de vinos, Molino Real de Teófilo Reyes con DO Málaga, excelente vino dulce, sin llegar a ser empalagoso como me pasa con los PX, acidez regulada, una moscatel muy bien trabajada.

Y hasta aquí la segunda entrega de la visita al Grao.

En la tercera, comentaré el restaurante del casino de Castellón, y también hablare del restaurante japonés del Grao. No me gusta hacer críticas negativas, pero en esta ocasión no me queda más remedio, todo sea para que os evitéis tirar el dinero, o si vais, por lo menos vayáis con la información necesaria.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros.

PD: Gracias a Ana por darme una visión crítica, desde ahora vigilo más mi redacción y procuro que se me entienda lo mejor posible.






lunes, 8 de noviembre de 2010

Visita al Grao, contraste de clases

Buenas a todos de nuevo.

Como ya dije en la última publicación, en esta ocasión he visitado el grao de Castellón para seguir con mis críticas y que terminaría hablando del restaurante del Casino Antiguo de Castellón.

Antes que nada, comentar que esta semana ha sido bastante ajetreada, y que he comido fuera de casa más de lo esperado, así que separaré las publicaciones para que no os canséis de leer antes de tiempo.

Y tras lo dicho, empecemos con la crítica!!!.

El primer restaurante a comentar será el Suquet de Peix de la plaza del mar del Grao de castellon, lo primero a resaltar es la plaza en sí, espacio abierto, en el que se asientan múltiples restaurantes-freiduria al mas puro estilo guirilandia, que de primeras echa para atrás, por que piensas "a saber que calidad de comida ofrecen y lo que es peor, a ver cuanto me cobran!!!", pero en estos sitios siempre nos exponemos a ello, y como unos cuantos palos ya me he dado, por eso resalto a este en particular.

Para mí, lo más bonito de este sitio, es precisamente que este en espacio abierto, así un día de invierno soleado lo puedes pasar comiendo en la calle (abren todo el año, o al menos esa es su intención), hay que tener en cuenta que en esta zona de 365 días que tiene el año, 320 hace sol, y no hay que desperdiciarlos.



Para muestra de lo que os decía aquí tenéis un ejemplo, estas son vistas desde la misma plaza un 4 de Noviembre.

Ahora pasemos a lo importante que es la comida, me vais a perdonar pero hay platos de los que no tengo foto, pero advertir, que las presentaciones no son nada del otro mundo, tengamos en cuenta que no dejamos de estar en un restaurante de sillas de plástico, mantel de papel... todo esto no quita que tengan una calidad de producto excelente, y que además sepan tratarlo. A resaltar de este sitio las croquetas caseras de vieira, cremosidad, sabor, y servidas con prácticamente todo el aceite ya absorbido, con lo que  empapan muy poco la blonda en la que te lo sirven. Otros entrantes a resaltar son el pulpito de roca, con un braseado muy bueno, las almejas a la plancha también están muy ricas, como veis, son platos que dependen únicamente de la calidad del producto, pero os aseguro que de la plaza, son los mejores, y encima a casi los mismos precios que el resto.

En esta ocasión, como plato "fuerte" pedimos un arroz de verduras, decir, que en esta ocasión iba acompañado por 2 grandísimas amigas, no por estatura si no por corazón, Pamela y Amelia, que nos juntábamos para desearle la mejor de las suertes en su nueva aventura trasatlántica a Pamela (todos sabemos que te irá fenomenal). Decir también que Ame fue quien me presento este local, y desde entonces he ido unas cuantas veces. Y como a Pamela le gustan las verduras más que a las cabras, esa fue la razón de este arroz. Del arroz diré que estaba bien, un buen punto, pero para mi gusto le faltaba sabor, insisto, era un arroz de verduras, a pesar de eso, en la paella no quedo ni un grano!!!.


Tras el arroz, vinieron los postres, algunos de los postres son caseros, no muy complejos, pero muy bien hechos, y como no, las chicas son unas enamoradas del chocolate, una del negro y otra del blanco, y como era una ocasión especial, había que dejarlo todo preparado, decir aquí, que me pusieron todas las facilidades para las peticiones, inestimable la ayuda de Beni, camarero del restaurante, que se portó todo el tiempo de forma excelente con nosotros, y que siempre que he ido, sea con restaurante lleno o vacío, siempre te atenderá con una sonrisa en la cara y transmite que le gusta su trabajo y el papel que desempeña en el restaurante, así pues, prepararon un mousse de chocolate con leche para Ame y una crema de chocolate blanco para Pamela, y como no podía ser de otra manera, se lo terminaron TODO.

Decir que las niñas tenían muchas ganas de pegarle bocado, y antes de que me diera cuenta ya se lo habían dado... con lo que no hay foto de los postres lamentándolo mucho.

Y hasta aquí la primera parte del recorrido, lo hago así por que les quiero dedicar este espacio en exclusiva precisamente a ellas, a Pamela y Amelia. Os merecéis mucho más que un hueco en este humilde blog, pero es un pequeño detalle que quería daros.

1 beso muy grande a las 2.

Y como siempre...

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros.




viernes, 5 de noviembre de 2010

Música en el blog

Buenas a todos, anunciar una novedad en el blog. Como habréis visto hay un instrumento nuevo en la página con el objetivo de amenizarla.

Si hay algo que me gusta tanto o más que la comida eso es la música, y con esta nueva adquisición puedo unir estas aficiones.

Seguiré experimentando hasta que lo domine.

Por cierto, en breve habrá nuevas publicaciones de restaurantes de la zona. En esta ocasión me desplazaré a la zona del grao para comentar el restaurante "Rafael", el restaurante freiduría "El Suquet" y por último, volveré a la ciudad de Castellón para comentar el restaurante del Casino Antiguo.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Dia de todos los santos en Kina de Categayo (CERRADO)

Siguiendo con la linea de publicaciones, hoy, día festivo y familiar, y teniendo en cuenta que vivo sólo, lo de familiar para mi implica aburrirme como una ostra todo el día, así que he optado por salir de casa (como tantas otras veces) y ver donde podía ir a comer, y la casualidad ha hecho que probara un restaurante al que  hacia tiempo le había echado el ojo.

Y la experiencia ha sido agridulce, digo agridulce por que el restaurante esta diseñado con mucho mimo, se les nota la ilusión en la decoración y como te sirven, pero por otro lado se les nota la falta de experiencia en la hostelería, o por lo menos en la hostelería de este nivel.

Así pues, aunque ellos ofrecen menú diario (abren todos los días a mediodía y las noches de viernes y sábado), decidí darme un homenaje e ir a carta.

De la carta decir que es corta tanto en platos como en vinos, pero está claro que como están los tiempos, y habiendo abierto hace 8 meses, en plena crisis, y sabiendo como es la población de la ciudad de Castellón (les asusta lo nuevo, y rehuyen del mantel de tela pensando que va a ser muy caro) no se pueden permitir, ni una carta amplia ni mucho personal. De hecho, era el único comensal, y según me comentaron, han hecho semanas muy, muy flojas.

Y tras ojear la carta, los platos elegidos fueron, de primero, huevos estrellados con hongos (en este caso robellones), de este plato decir, que estaba falto de sal, y los robellones habían perdido bastante sabor, pero con un poco de pan recién sacado del horno y crujiente, la yema con la cebolla y el ajo que quedaba en el plato estaba de vicio.


En cambio, el segundo plato, compensó con creces al primero, un steak tartar a cuchillo, muy bueno, carne de calidad, con una mezcla de la alcaparra, la cebolla, la anchoa... muy buena, un punto picante suave (me ofrecieron probarlo antes por si lo quería más intenso) y estaba, como he dicho antes, muy bien.


Os pido perdón por la foto, pero tenía hambre y ya hice la mezcla cuando me di cuenta que tenía que haberla hecho, pero la imagen no hace justicia al sabor, os lo prometo.

Como postre (del cual no hay foto) un zumo de naranja con helado de vainilla, postre pasable, pero nada del otro mundo, por lo que no comentaré mucho de él.

Pero lo mejor de la comida fue, sin duda alguna, el vino, puestos a salir, me di el gustazo de pedirme una botella para mi sólo, sabiendo que luego me la llevaría a casa, así que opte por un chateau la fleur 2005, que os aseguro esta de vicio, y que a lo largo de estos 2 días seguiré disfrutando en casa, espectacular en nariz, y de entrada suave en boca, con persistencia media, y que va de maravilla con el tartar.


Tras la comida, estuve hablando con la propietaria, y comprobé lo que comentaba la inicio, restaurante hecho con la mejor de las intenciones y con mucha ilusión, proyecto personal que como novedad funcionó a medias en esta ciudad. Son una pareja de Madrid que se mudaron a Castellón por razones personales y se decidieron a iniciar una nueva empresa con la idea de ofrecerle gastronomía de más alto nivel del que la ciudad está acostumbrado y a un precio asequible. Según me dijo, los platos de cuchara los hacen ricos y viendo que llega el invierno le daré una segunda oportunidad.

Por mi parte lo recomiendo, principalmente si es para cenar y con pareja, la decoración es intimista y acogedora, y la comida rica, así que, por que no darle una oportunidad?.

1 beso para vosotras y 1 abrazo para vosotros